El siguiente, por favor

Siempre muy ansiosos por el futuro, recogemos malos hábitos de la expectativa. Algo siempre se está aproximando, cada día hasta que entonces decimos, contemplando desde un acantilado cómo se acerca la diminuta y brillante armada de promesas. ¡Qué lentas son! ¡Y cuánto tiempo desperdician, rehusándose a apurarse!Sin embargo, nos dejan sosteniendo unos tallos miserables deVer más ⟶

Modestias

Las palabras tan sencillas como las alas de las gallinas no mienten, no adornan de más las cosas. Son muy tímidas.Pensamientos que se mezclan como peniques a través de cada reinado, se desgastan a su sentido más simple, aún permanecen.Las malas hierbas se supone que no crecerán pero en grados algunas consiguen una flor, aunqueVer más ⟶

Amor, debemos partir ahora

Amor, debemos partir ahora: no dejes que sea amargo y calamitoso. En el pasado ha habido demasiada luz de luna y autocompasión: dejemos que termine: porque ahora al fin nunca el sol había andado tan arrogante por el cielo, nunca los corazones estuvieron más avidos de ser libres, para patear mundos, bosques frondosos, tú yVer más ⟶

A Sydney Bechet

Esa nota que sostienes, estrechándose y elevándose, se sacude como New Orleans reflejada en el agua, y en todos los oídos apropiados la falsedad se despierta, construyendo para algunos un legendario barrio de balcones, canastas y cuadrillas de flores, todos haciendo el amor y compartiendo… Oh, ¡toca aquella cosa! Enmudece gloriosas historias de la villaVer más ⟶