Jugadores de segunda en el banquillo

Autor: Malone, Tyler

Demasiado frío en las mejillas para sentarse en las gradas, entonces el banquillo de beisbol era nuestra cabina de confesionario –resolvíamos cosas, pero no había nada que confesar-, solo huesos aburridos, pero los acoplamientos eran difíciles de obtener –pero las cosechas eran tan finas como un intestino delgado- ella se deslizó cerca de mi abrigo “¿quieres probar de nuevo?”

Yo cubrí su seno izquierdo con mi mano derecha y dije “nena, podemos intentarlo de nuevo”.

Soplamos grises descargas en nuestras gargantas.

traducción: HM

Vistas: 1
Compartir en