Autor: Malone, Tyler

El braille podría haberme detenido, pero yo no estaba ciego, la puerta parecía la misma y se balanceaba lo mismo, y todo lo que yo sabía era el dolor de una vejiga implorante.

Adentro y buscando la caja de porcelana pero en vez vi compartimentos en filas como lápidas. Y no vi sitios para mear o salpicaduras en linóleo, solo lugares para sentarse.

Yo me paré, con la puerta abierta, en medio de la corriente, un grito estremecedor: “Ey tú, no puede hacer eso aquí. ¡Este es el baño de damas!” Yo flexioné mi abdomen para hacer un apuro de la naturaleza causando el arqueado chorro para desviarse salvaje y errante.

Yo lavé mis manos, las damas esperaron. No había perdón en sus ceños fruncidos.

Mientras me secaba vi la máquina que dispensa caramelos colgando en la pared. Caminé hacia ella para ver los sabores. “No. Eso no es para ti. Lo descubrirás un día”.

Siendo pequeño, qué poco sabía lo afortunado que era, todavía no un hombre.

traducción: HM

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