Autor: William Morris
Nuestras manos se encontraron, nuestros labios encontraron nuestras almas, quien sabe cuándo el viento sopla, cómo las almas de luz derivan en medio de un conjunto de anhelos, ¿si tú olvidas yo puedo olvidar el tiempo que no fue hace mucho?
Tú no estabas silenciosa entonces, pero contaste dulces secretos queridos, yo me acerqué tanto que tus mejillas avergonzadas se excitaron, ¡apenas podía contemplar tus ojos! ¡Ah, fue entonces hace tanto tiempo!
Mis labios temblaron y tu te hubieses apartado pero no tenías corazón para hacerlo, bajo mis labios tu mejilla ardía, pero ninguna reprimenda que deba aprender, sí, parece que todavía, no hace mucho tiempo.
Estarás contenta el día cuando en mí esté este amor, una ociosa fantasía que ha pasado, y nos encontraremos, sonreiremos y diremos ‘¡Oh, suspiros desperdiciados de hace tanto!’
¿Te regocijarás de que has preparado palabras frías, espectáculos aburridos entre corazones acercados, que frío de corazón vivo todavía, olvidando aún que olvido los inapreciables días de hace tanto?
traducción: HM