Las purgas tempranas

Autor: Heaney, Seamus

Tenía seis cuando ví primero a los gatitos hundirse. Dan Taggart los arrojó, ‘las mierdecillas rastreras’ en un cubo, un frágil sonido metálico, suaves pezuñas rascando enloquecidas. Pero su diminuto estrépito pronto fue salpicado. Fueron colgados en el morro de la bomba y el agua bombeaba hacia dentro.
‘Seguro, ¿no es mejor para ellos ahora?’ dijo Dan. Como guantes húmedos ellos se agitaron y brillaron hasta que él los arrojó al estercolero, lustrosos y muertos.
De pronto atemorizado, durante días anduve tristemente por el patio, observando los tres restos empapados volviéndose harinosos y crujientes como el viejo estiércol de verano hasta que los olvidé. Pero el miedo volvió cuando Dan atrapó ratas grandes, cazó conejos, le disparó a cuervos, o, con un tirón enfermizo, decapitaba a las gallinas viejas.

Todavía, vivir desplaza falsos sentimientos y ahora, cuando empuja a cachorros chillando a ahogarse me encojo de hombros, ‘malditos cachorros’. Tiene sentido: ‘Prevención de crueldad’, la charla corta hielo en la ciudad donde ellos consideran la muerte como no natural, pero en las granjas bien administradas hay que reducir las plagas.  

traducción: HM

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