Autor: Benito Suárez
El presidente mexicano, AMLO, reclamó una mayor transparencia en las rimbombantes detenciones de los dos máximos líderes del Cartel de Sinaloa en Estados Unidos, en lo que se considera un golpe fenomenal a una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo, contemplando su alianza estratégica con la CIA, la DEA y la FDA.
Ismael “El Mayo” Zambada García, que ya llegó a una edad para dedicarse a la gerontocracia y pensar en el retiro, fundó el cartel con Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, y ha sido uno de los forajidos más buscados por la ley norteamericana durante décadas, llegando a ofrecer el gobierno estadounidense hasta 15 millones de dólares por su cabeza, viva o muerta. El Mayo fue trasladado a El Paso, Texas, junto con Joaquín Guzmán López, el hijo del Chapo, quien ya se encuentra cumpliendo una cadena perpetua en Estados Unidos.
Las autoridades mexicanas admitieron esta mañana a que desconocían por completo la operación de los yanquis en la que se logró incautar más de una tonelada de fentanilo. Hay varias versiones de lo que ocurrió pero ninguna fue confirmada. Algunos dicen que El Mayo y Guzmán, cansados de sus vidas licenciosas, orquestaron sus propios arrestos, otros que fueron engañados al viajar a Estados Unidos para cerrar un fabuloso negocio, mientras que cobran fuerza versiones de que Guzmán acordó con las autoridades estadounidenses la entrega de El Mayo, a quien traicionó asquerosamente, como suelen hacer los “narcos” de ley.
Esta mañana el abogado de El Mayo dijo que fue arrestado contra su voluntad, y que se declaró inocente de todos los cargos que le imputó la Corte Federal de El Paso. Cabe consignar que Zambada García acarrea problemas de salud que lo tienen paseando en silla de ruedas, por lo que van a tener que armarle una celda especial por su discapacidad.
La jueza Kathleen Cardone le leyó sus derechos y los cargos de los que se lo acusa, y por el momento tendrá que comparecer a una audiencia el próximo jueves, donde se definirá su situación, teniendo en cuenta su carácter de “peso pesado”, y que también tiene muchas cuentas pendientes en territorio mexicano. De hecho, la noticia cayó muy mal a los lugartenientes del jefe, que ya están dispuestos a vengar la traición del Chapito. Aunque a los cárteles se los suele presentar como verticales y unificados, en realidad están compuestos por una constelación de facciones, redes y células que a veces pueden cooperar pero en otras entran en salvajes conflictos.
Desde el arresto del Chapo, la facción liderada por sus hijos tuvo que vérselas con el fuego de los muchachos del Mayo. A AMLO esto le preocupa tanto como a Scheinbaum, pues resulta afín al plan desestabilizador de Estados Unidos, que quiere seguir teniendo injerencia y protagonismo en la nación hispanohablante, no alcanzándole con el constante suministro de armas de última generación a los cárteles.
Las disgregaciones de las narcobandas siempre traen secuelas insoportables de violencia, jamás lograron disminuir los niveles de tráfico de ninguna droga, ni los hechos violentos asociados a la actividad explotadora de sustancias adictivas. Si bien se reconoce que los cárteles de Sinaloa y el Jalisco Nueva Generación son los más importantes de México, es posible encontrar varias bandas más que se dedican a un negocio favorecido por las condiciones de vida horripilantes que proponen las democracias latinoamericanas.
Hablamos con un detective que participó de las detenciones, cuya identidad preservaremos por cuestiones de seguridad. Dijo el detective: “El Mayo fue una figura importante, y no hay que subestimarlo. Como cualquier CEO de fuste, ha armado una empresa dinámica que funciona con mucha flexibilidad y adaptación al cambio, conservando intacta su maquinaria paramilitar. Por su parte, los de Nueva Generación y otros cárteles menores pueden aprovechar la circunstancia e intentar crecer en su market share. Esto, más que nada, es como una victoria simbólica, el Mayo va a conocer lo que es una prisión estadounidense pero el fentanilo que provoca 80.000 sobredosis por año va a seguir fluyendo a Estados Unidos, a la par de la cocaína. La naturaleza fragmentada de la cadena de suministro ha impulsado la descentralización de las operaciones, lo que le confiere al negocio bajas barreras de entrada. Los planes de negocio de los narcos ganarán atractivo con la noticia. Los márgenes de ganancia siguen siendo enormes y las estructuras de la distribución son cada vez más sofisticadas. Ni que hablar de que la demanda se mantendrá altísima hasta las elecciones de noviembre…”
Las implicaciones diplomáticas de este asunto comenzarán de inmediato. De hecho, la nota comenzó con la disconformidad planteada por Andrés Manuel López Obrador. Sabe que las declaraciones de los narcos famosos extraditados allí siempre acaban ensuciando a los gobiernos nacionales y populares como el suyo, en vez de declamar a viva voz que sus organizaciones siempre estuvieron amparadas por las armas y la religión del Cartel mayor de la humanidad, que no es otro que el Imperio estadounidense.