Autor: Rupert Brooke
Por el palacio de mi corazón se agolpan innumerables pensamientos, y allí, más callada y, como una niña, la más sabia, te sientas en trono elevado, y graciosa. Todo el día grandes esperanzas con armadura dorada, fantasías bufonescas, y sueños peregrinos, y pequeños suspiros de mendigo, se inclinan a tu bendición, van por su camino. Y los recuerdos de cortesana gravemente enjoyados te adoran, aman y cuidan, todo el día.
Pero cuando duermo, y todos mis pensamientos desvarían, cuando la alta sesión del día está terminada, y viene la oscuridad, entonces, con la luz desvaneciéndose, tu camino atendido por doncellas de lirio, orgullosa del trono acostumbrado, balanceándote soberbiamente, tú, como una reina, te adentras en la noche.
traducción: HM